lunes, 19 de septiembre de 2016

Herramientas para viajeros: la Tarjeta Sanitaria Europea (TSE)

Tarjeta sanitaria europea (TSE)
Las condiciones de los servicios sanitarios y de seguridad social en Europa varían mucho de unos países a otros. Por ejemplo, en España, la asistencia sanitaria es universal y gratuita mientras que en sitios como Alemania o Francia es privada. Para conocer la diversidad de sistemas sanitarios en la Unión Europea, en la página web de la Comisión Europea puedes consultar las características de asistencia sanitaria por un tratamiento médico imprevisto.

Cuestiones a tener en cuenta


Debido precisamente a que la atención en la sanidad varía de un país a otro, es interesante que, cuando viajes por Europa, lleves contigo la Tarjeta Sanitaria Europea (TSE), que es un documento gratuito que te permite acceder a la atención sanitaria pública -necesaria por motivos médicos- durante una estancia temporal en cualquiera de los 28 Estados miembros de la UE, además de Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza, en las mismas condiciones y al mismo coste que las personas aseguradas en ese país.

Es importante subrayar que esta tarjeta permite acceder a la sanidad pública, que no privada y que se emplea en estancias temporales. Es decir, que si lo que estás haciendo es trasladar tu residencia habitual a otro país, para recibir asistencia médica en este nuevo país de residencia no sirve la tarjeta sanitaria europea.

Además, es necesario ser consciente de que la TSE no es una alternativa al seguro de viaje; no cubre los gastos si se viaja con la finalidad expresa de recibir tratamiento médico; y no garantiza la gratuidad del servicio (como los sistemas de asistencia sanitaria de cada país son diferentes, los servicios que en un sitio son gratuitos pueden no serlo en otros).


Cómo solicitar la TSE


Hay dos vías para solicitar la Tarjeta Sanitaria Europea: por Internet, a través de la Sede Electrónica de la Seguridad Social, sin la necesidad de disponer de certificado digital para acceder a este servicio; o presencialmente, en cualquiera de los Centros de Atención e Información de la Seguridad Social (CAISS).

En cualquiera de los casos, la TSE llega al domicilio que figure en las bases de datos de la seguridad social en un plazo inferior a 10 días. Además, en caso de que por cualquier motivo no sea posible la emisión de la TSE, o si el  desplazamiento es inminente se puede solicitar el Certificado Provisional Sustitutorio de la TSE.

En mi caso, yo solicité la TSE a través de Internet sin certificado electrónico y, tan solo rellenando un formulario con tus datos básicos, te la envían a casa. Es importante que el domicilio que tienes asociado en la seguridad social esté actualizado.

Yo tenía dudas acerca de la dirección puesto que me había mudado hacía poquito pero pude comprobar que los datos eran correctos a través de la sede electrónica de la seguridad social. En este caso, sí que me hizo falta el certificado electrónico pero desde aquí os animo a que os hagáis uno porque es un trámite sencillo (incluso podéis hacerlo con el DNI electrónico) que nos ahorra mucho tiempo de cara a la administración.

Recuerdo también que, como no estaba segura de que la tarjeta me fuera a llegar a tiempo (te dicen 10 días pero a mí me llegó mucho antes) pedí con el certificado electrónico el Certificado Provisional Sustitutorio de la TSE, que es un documento que descargas en PDF directamente en el trámite.
LA TSE tiene una duración por lo general de dos años. No se renueva de manera automática. Para volver a solicitarla, es necesario realizar de nuevo los trámites anteriores.

En este vídeo tienes más información


Y aquí puedes acceder a la descarga de la aplicación con más información acerca de la TSE.

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